En busca del tesoro de Urgull

En 1813, una niña de la parte vieja llamada Karmele Goienetxe, escondió su tesoro más querido en algún lugar del monte Urgull, justo antes de abandonar San Sebastián y evitar la guerra y la quema de la ciudad. Ahora, gracias a un plano y una carta que Karmele dejó escrita para las generaciones futuras, sabemos dónde se esconde ese tesoro. Solo hay que seguir las pistas y pruebas que encontraremos en el documento.

En busca del tesoro de Urgull