Noticias

26/9/2024

La artista portuguesa Vanessa Barragão presenta en Cristina Enea su nueva propuesta expositiva inspirada en los fondos marinos: Submerso-Imerso

Formas orgánicas y fantásticas, que recuerdan a criaturas de las profundidades oceánicas, ocuparán las tres salas expositivas del palacio de los duques de Mandas, desde hoy jueves, 26 de septiembre, hasta el 15 de diciembre. Se trata de la exposición de la temporada de otoño de Cristina Enea, la muestra Submerso-Imerso, de la artista Vanessa Barragão. Eneko Calvo, técnico de proyectos expositivos de Fundación Cristina Enea, ha explicado que “el resultado de todas las piezas de Vanessa es fascinante, un microcosmos acuático que transporta a quien visite la muestra a un universo de asombro e intriga”.

La exposición abrirá sus puerta este jueves 26 de septiembre, a las 17:00 h., en un acto público donde estará presente la propia artista, para ofrecer todos los detalles de su exposición. Una hora antes, a las 16:00 h., la artista ofrecerá un encuentro dirigido a los medios de comunicación interesados.

La muestra opta por una interpretación abstracta del mundo natural, y para ello se sirve de piezas textiles y de metal, reflejando la interconexión de nuestro ecosistema.  Barragão ha señalado que el objetivo de la exposición es “sumergir al visitante tanto en los fondos marinos, con el objetivo de concienciarlo sobre la necesidad de su preservación, como en los procesos creativos que llevan al artista a desarrollar sus proyectos y propuestas expositivas y artísticas”. Así, la artista se resiste a una representación literal del mundo natural en favor de una interpretación más abstracta.

Todas las piezas han sido elaboradas por Barragão manualmente, con técnicas ancestrales, utilizando principalmente lana. Un trabajo, explica la propia artista, que “las personas de más edad han venido haciendo en sus casas desde hace mucho tiempo, principalmente las mujeres”, aspecto que desea “poner en valor y visibilizarlo”.

Las piezas de Vanessa son reconocibles como formas orgánicas, pero hay algo fantástico en la obra, algo de otro mundo. Parecen casi extraterrestres, de otro planeta, “como las extrañas especies y criaturas que se encuentran en las profundidades de los océanos o las ideas y reflexiones aún sin formas definidas que poblan la mente de los artistas durante su proceso creativo”, ha explicado Barragão.